Las entidades sanitarias aseguran que las donaciones de sangre no están suspendidas por la cuarentena. Además, solicitan que la gente continúe donando para conservar estables los stocks de sangre y garantizar la atención de pacientes y emergencias
La cuarentena obligatoria frente al avance del COVID-19 paralizó la actividad diaria de los argentinos. Sin embargo, una de las excepciones es la del trabajo de los profesionales de la salud en hospitales, hemocentros y bancos de sangre.
Según estimaciones de la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de la República Argentina y la Cámara de Entidades de Diagnóstico y Tratamiento Ambulatorio ( Adecra-Cedim ), a partir de la cuarentena disminuyeron 80% las donaciones de sangre voluntarias o por pedido de algún familiar o conocido. Esto afecta de manera directa a la reposición de los componentes sanguíneos para la atención de cirugías, emergencias y pacientes hematológicos en tratamiento.
Para hacer frente a esta situación, desde los centros de salud y hemocentros adoptaron distintas estrategias como sistemas de turnos para evitar las aglomeraciones, separación entre camillas, extensión de los horarios de atención, emisión de un certificado ambulatorio para que el donante pueda asistir al turno y desarrollo de zonas de triage para garantizar la seguridad del voluntario y del personal de la salud. Además, desde la ONG Dale Vida! , que trabaja con la Red de Medicina Transfusional del Ministerio de Salud porteño, lanzaron una aplicación móvil que geolocaliza el punto de donación más cercano al domicilio del voluntario.
Por: Florencia Abd y Florencia Rodríguez Altube